5 actividades para pacientes con demencia senil

La demencia senil es una enfermedad que afecta el comportamiento emocional, el pensamiento, la percepción, el lenguaje o el juicio. Lo más complicado es que las personas pierden la mayoría de sus facultades para realizar tareas diarias y esa es la gran dificultad que sufren los familiares a cargo, haciendo su labor más extenuante y complicada.

Esta enfermedad se presenta de forma degenerativa e irreversible y aunque existen muchos estudios para contraatacar los síntomas aún no se encuentra cura. Hay programas de estimulación cognitiva realizados por neuropsicología que, dependiendo de cada caso, plantean un procedimiento específico y dan buenos resultados para que la persona se mantenga autónoma el mayor tiempo posible.

También existen ejercicios que se pueden realizar en casa y que ayudan a frenar el deterioro en el proceso de información, la atención, la memoria, entre otras. Este tipo de actividades son recomendadas en la fase inicial de la enfermedad cuando hay un deterioro cognitivo leve.  Aquí te damos algunas actividades para que las realices con tu ser querido:

Árbol genealógico con fotos familiares: Con tu familiar busca todas las fotos que tengas de la familia y en una cartulina pégalas en orden genealógico dándole importancia a la fotografía donde aparece ella o él y su relación con las otras personas. A cada rostro escribirle el nombre completo.

Vamos a ordenar y organizar: Para mantener la mente activa no hay nada más útil que separar objetos por color o forma como botones, útiles escolares, utensilios de cocina, ropa, juguetes entre otros. Por eso, a la hora de arreglar busca a tu familiar y ponlo a ordenar contigo armarios o cajones.

Juegos de mesa: Son un estímulo estupendo para: reactivar la memoria, utilizar todos los sentidos y pasar un tiempo agradable en familia. Hay juegos de cartas muy sencillos que ayudan a agrupar el mismo número o hacer escaleras como Continental o Rummy. Por otro lado, juegos como Pictionary, Lotería o Trivial ayudan a la memoria y son muy divertidos.

Cuaderno de historias: Consigue un cuaderno grande, tijeras, pegante, colores y revistas de los temas que a tu familiar más le guste. Dile que busque en las revistas imágenes relacionadas con un tema específico para ponerlo en el cuaderno. Si el tema es cocina, por ejemplo, buscar figuras relacionadas con comida italiana y que él o ella los recorte y vaya haciendo recetas o historias sobre el tema en el cuaderno. También puede pintar, escribir o idear más elementos para incluirlos.

Actividades manuales: Desde hacer figuras con plastilina hasta arreglar el jardín son actividades que ayudan a la motricidad y dan bienestar. En los pacientes con demencia senil no solo hay que ayudar a la memoria sino que también estimular todos los sentidos para que la mente se concentre, establezca analogías y retenga información. Por eso, regar las flores, sembrar una mata o jugar con plastilina son actividades que estimulan nuestro sentido del tacto y además pasamos un rato muy agradable.

Escucha, evoca, canta y baila: No hay mejor terapia que la música, y más cuando se trata de estar feliz. Por eso busca esas canciones que más le gusten a tu familiar y pasa un momento donde recuerden épocas felices, canten y bailen sin parar.